Cuando llega el verano, la isla de Mallorca se convierte en un verdadero paraíso de diversión, sol y festividades. Sus fiestas de verano típicas son una celebración vibrante de la cultura balear, donde lugareños y visitantes se unen para disfrutar de música, bailes tradicionales, deliciosa gastronomía y una atmósfera festiva inolvidable.
Fiestas de San Juan:
Una de las celebraciones más esperadas en Mallorca es la noche de San Juan, que marca el solsticio de verano. Las playas se llenan de hogueras, música y bailes hasta altas horas de la madrugada. Los fuegos artificiales iluminan el cielo, mientras la gente salta por encima de las llamas para purificarse y atraer buena suerte.
Fiestas patronales:
Cada pueblo y ciudad de Mallorca tiene su propia fiesta patronal durante el verano, donde se honra al santo o a la santa que protege a la localidad. Estas festividades suelen durar varios días e incluyen desfiles coloridos, música en vivo con las típicas “batucadas” de cada pueblo, bailes tradicionales, productos artesanales y gastronomía típica.
Los “Correfocs”:
Los “correfocs” son una tradición fascinante que tiene lugar en varias localidades mallorquinas durante el verano. Durante esta fiesta, grupos de personas vestidas de demonios y criaturas mitológicas recorren las calles lanzando fuegos artificiales y petardos, mientras la gente los sigue. Es una experiencia llena de adrenalina que mezcla folklore y diversión.
Fiestas en la playa:
En Mallorca, el verano es sinónimo de playa y diversión. Durante la temporada estival, muchas playas de la isla organizan fiestas temáticas, conciertos al aire libre y eventos deportivos acuáticos.
Las fiestas de verano típicas en Mallorca son una muestra vibrante de la cultura balear y una oportunidad para sumergirse en la alegría y la diversión de la isla.
